El uso de dispositivos móviles afecta mucho al envejecimiento facial.
Os habéis parado a pensar cuántas veces al día doblamos el cuello para mirar el móvil? La respuesta es unas 150 veces diarias.
Cuando se baja la cabeza demasiado para mirar el móvil, se ejerce una presión de unos 20 kilos sobre la columna. La piel de la zona anterior del cuello termina por ceder y se acumula grasa. Tal y como dice la investigación de Hansaj, este podría ser un motivo de aparición de papada, aunque no es la única causa.
Así pues, para evitar este problema lo más correcto sería levantar el dispositivo a la altura de los ojos, y no bajar la cabeza para mirarlo.
Por otro lado ,la luz azul que emite el smartphone podría influir en la disminución de la producción de colágeno, elastina y ácido hialurónico, lo que provoca la sequedad de la piel y pérdida de elasticidad, lo que genera flacidez en el tejido. Por eso es importante el uso de protección solar a diario, no solo por la exposición al sol, sino también por la exposición a la luz de pantallas de móviles.