Es un tratamiento de Medicina Regenerativa para la prevención del envejecimiento aplicado a cara, cuello, escote, manos, cicatrices y alopecias.
También lo usamos después de una intervención de cirugía, peeling o láser, para acelerar la recuperación.
Se realiza la extracción de sangre del propio individuo, esta sangre se centrifuga y se separa el suero de las células: glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Se seleccióna la parte con plaquetas y posteriormente, añadiendo cloruro cálcico, se liberan los factores de crecimiento que están dentro de las mismas y se inyecta en la zona a tratar mediante mesoterapia.
Las sesiones se realizan cada tres semanas, normalmente en tres sesiones.
Se puede combinar con otros tratamientos, sobre todo con láser y peelings potenciando mucho el efecto reparador de los mismos.
Lo más importante es la asepsia, para evitar las infecciones.
A diferencia del reticulado que se usa para rellenar arrugas, el no reticulado es muy fluido, similar al natural del organismo. Posee un su gran poder hidratante, activa los fibroblastos lo que implica más colágeno y elástica, neutraliza los radicales libres.
Se suelen realizar tres sesiones: una al mes durante tres meses
- El sodio, el potasio, el calcio,
- Silicio
- Vitaminas (A, B, C, E, K)
- Acidos nucleicos
- Dimetilaminoetanol (DMAE) : acción antioxidante y reafirmante
- Carolina: antioxidantes eficaz contra el estrés oxidativo
- Argireline: mejora las arrugas
- Coenzimas…
Se suelen realizar tres o cuatro sesiones separadas por dos semanas entre una y otra sesión.