Las ondas de choque se usaron por primera vez en medicina en el año 1980 para la destrucción de cálculos renales.
En el campo de la Medicina Estética y en concreto de la celulitis, las ondas de choque se introducen en el cuerpo induciendo la vibración en el tejido conectivo, y corrigiendo los factores desencadenantes de la celulitis.
Acciones:
- Aumenta el riego sanguíneo, lo que supone mayor suministro de oxígeno y con crecimiento de nuevos capilares.
- Estímulos de fibroblastos y aumento de fibras de colágeno aumentando la firmeza y la elasticidad de la piel.
- Aumento de eliminación de metabolitos por el sistema linfático y vascular que conduce a una reducción del edema .
- Efecto mecánico sobre la fibrosis, mejorando los hoyuelos y el aspecto de piel de naranja.
Indicaciones:
- Celulitis
- Fibrosis
- Edemas linfáticos
- Cicatrices retráctiles
- Dolor
Tratamiento: la duración de la sesión depende del área a tratar, unos 20 ó 30 minutos. El número de sesiones es entre 10 y 12 sesiones a razón de una o dos por semana.
Efectos secundarios: Los más frecuentes son los hematomas
Contraindicaciones: embarazo, neoplasias, infecciones activas, anticoagulantes, marcapasos.
El tratamiento de ondas de choque se puede asociar a cualquier otro tratamiento como mesoterapia, carboxiterapia, LPG, radiofrecuencia…
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