Consiste en un alargamiento brusco o progresivo del orificio del pendiente.
Causas :
- traumáticas, por arrancamiento
- evolutiva, en pacientes con atrofia cutánea subcutánea , y pendientes pesados
Grados:
- Leve: consiste en un alargamiento mínimo. La solución de estos lóbulos pueden realizarse con técnicas localizadas en el mismo orificio, no habiendo cicatriz más allá del propio orificio. Se puede utilizar ácido hialurónico para mejorar el lóbulo, sin cirugía.
- Moderado-grave: orificios pueden estar rasgados hasta casi el borde libre y se necesitan técnicas con cicatrices a lo largo del desgarro. En este grupo incluimos los lóbulos dilatados por pendientes.
- Lóbulo bilobulado o bífido: el lóbulo que ha llegado a romperse hasta el borde libre y se presenta con dos fragmentos. En este caso hay que retirar una parte del tejido y hacer una cicatriz a modo de triángulo.
La solución en todos los lóbulos rasgados es quirúrgica, excepto en grados muy leves en las que se puede optar por soluciones médicas, como infiltración de ácido hialurónico o grasa propia.
- Anestesia local
- Tiempo : 1-2 horas
- Recuperación : vida normal evitando ejercicio intenso y bañarse en el mar o piscina. Se deben desinfectar, limpiar y secar diariamente las heridas. Pasados 7-10 días se suelen quitar los puntos y habrá que esperar al mes para volver a hacerse unos nuevos orificios. Una vez hecho el nuevo agujero, la cicatriz será muy poco visible o invisible al quedar muchas veces oculta por el nuevo pendiente.